Martes, 26 de Mayo de 2015
Por Cuauhtémoc Anda Gutiérrez
Es con gusto que como
mexicanos observamos el encuentro de los dos países gigantes de América Latina.
En efecto son los dos países más grandes en territorio que sumados hacen el 55%
del territorio, también el 55% de su población y el 62% del Producto Interno
Bruto (PIB) de la región. Estos simples datos muestran la necesidad de mejorar
la comunicación entre ambos países. En efecto, el territorio de Brasil es de
8.5 millones de Km2 de los 3.6 millones de selva amazónica, en tanto
que México tiene poco menos de 2 millones de Km2 y la población
estimada al 2014 es de 202 millones para Brasil y 120 millones para México.
Tenemos muchos gustos
comunes, desde luego la música, tanto la alegre de los carnavales como la
romántica de Roberto Carlos también a ellos les gusta nuestra música y en
particular los mariachis, ambos pueblos comparten dos religiones, la católica y
el fútbol. En ambos sitios se habla de combatir la pobreza, pero lo que en
realidad quieren decir es combatir la ignorancia que deja el atraso educativo
de ambos pueblos. En ambos se sufre la derrota en la guerra contra el
narcotráfico, pero curiosamente sus poblaciones suelen afirmar que son felices.
De aquél país tengo
recuerdos bellísimos, en primer lugar su gente, después sus playas, la comida y
desde luego las maravillosas cataratas de Iguazú, además sus festivos
carnavales y lo que significan en términos de cultura para sus jóvenes
Recuerdo que hacia
1975 tuve un encuentro con el Maestro Fernando Henrique Cardoso, cuando era
académico y con motivo de un encuentro de las escuelas de economía de América
Latina nos reunimos en la Universidad Central de Caracas a la que asistió el
Maestro José Luis Ceceña, Director de la Escuela de Economía de la Universidad,
quien esto escribe era Director de la Escuela de Economía del Politécnico y
hablamos del tópico obligado, ¿cómo salir rápidamente del subdesarrollo?
Las ideas de Cardoso me
parecieron claras y lucidas por ello, años después cuando llegó a la
Presidencia de Brasil sabía que iba a hacer un magnífico papel como felizmente
sucedió.
Las llamadas Reformas
Estructurales que el Congreso Mexicano aprobó en este sexenio, Brasil las hizo en
1997 básicamente la de energéticos y se reformó Petrobras. Por cierto, en años
recientes a la Presidente Rousseff han estallado escándalos por
corrupción en dicha empresa (¡cuidado México!)
Las raíces políticas
nuestra ilustre visitante, Dilma Rousseff son claramente de izquierda,
se ha abierto camino en un país supuestamente machista (202 millones,
estimación en el 2014) y además al terminar sus primeros cuatro años buscó la
reelección y la obtuvo.
En el 2013 al empezar
la actual administración y trazarse las Reformas Estructurales se empezó a
hablar en el extranjero del “momento mexicano”, pues bien, años antes el mundo
hablaba del “momento brasileño” e incluso se acordó que en Brasil fuera el
campeonato mundial de futbol en el 2014 y los Juegos Olímpicos en el 2016, los
dos compromisos muy audaces, del primero ya salieron aunque con algunos
raspones y para el 2016 para el que faltan unos pocos meses están tratando de tener
las obras en tiempo y forma.
Afortunadamente es
nuestra embajadora en Brasil la brillante política y diplomática Beatriz
Paredes, quien desde hace 35 años a un grupo de amigos que fuimos compañeros en
la Cámara de Diputados, nos hizo saber su gusto por la música brasileña, lo que
era normal, pero lo que llamaba la atención es que la interpretaba muy bien y
además se acompañaba de la guitarra.
Beatriz Paredes ha
sido una estupenda legisladora, muy jovencita dirigió el Congreso Local de
Tlaxcala, llegó a la Cámara de Diputados en 1979 y de inmediato fue electa para
presidir la Cámara y contestar el Informe el 1º de septiembre de 1979.
A varios nos parecía
imposible que una muchacha con tipo de estudiante de prepa o iniciando su
carrera presidiera, una Cámara con 400 diputados en la que había hombres de la
política conocidos en todo el país, incluso varios que habían estado en las
cárceles como Valentín Campa, Othón Salazar, Pablo Gómez, etc. Gente
experimentada como don Antonio Carrillo Flores, Abel Vicencio Tovar, Francisco Ortiz
Mendoza, Luis Farías, etc., después ocupó otros cargos hasta llegar a ser
Gobernadora de su Estado natal Tlaxcala, donde año tras año a sus amigos a
quienes nos hacia el honor de invitarnos nos deleitaba con piezas oratorias,
mezcla de trabajo y resultados con historia tlaxcalteca y poesía.
Posteriormente incursionó en la Diplomacia fue embajadora en Cuba y ahora en
Brasil.
No tengo duda que
Beatriz ama a su tierra y la conoce como pocos y por el afecto que le tiene a
Brasil debe de ser una estupenda embajadora cuya sabiduría y experiencia sabrá
aconsejar rumbos comunes en beneficio de ambos países.
Doña Dilma Rousseff les mexicanos nos hacemos ilusiones para mejorar nuestra balanza comercial y
establecer mejores relaciones entre ambos países.
Muy querida y
respetada Beatriz con tu talento deseamos concretes algunas de tus ideas en
esta nueva aventura. Se bienvenida a tu casa.